miércoles, 27 de julio de 2011

DE NUEVO EN ASIA


Pues sí, ya estoy otra vez en mi querida Asia. Después de cuatro meses en Occidente parece que algo me tira de nuevo hacia Oriente. ¿Serán sus atractivos naturales, sus tradiciones, su gente, su gastronomía, su cultura, su ritmo de vida, lo barato que resulta a nuestro bolsillo...? Agítese todo ésto un poco, mézclese bien y ya tenemos el resultado, rico ¿verdad?, a mí desde luego me encanta y por eso he vuelto.

Además no me debieron bastar los dieciocho meses seguidos que pasé recientemente y quiero más. Esta vez quiero tocar Filipinas, algunas islas de Indonesia y después ya se verá. Para empezar voy a pasar dos meses en Tailandia descubriendo sitios que no conozco y repitiendo algunos que me han marcado bastante y de paso aprovecharé para visitar buenos amigos.


Llegué ayer a Kuala Lumpur y la ciudad me recibió con la típica bofetada de calor y humedad bestial propia de la estación de los monzones del suroeste en la que nos encontramos. Apenas pegúe ojo en las trece horas que dura el vuelo entre Londres y Malasia por lo que llegué con un jet lag espantoso. Unicamente salí a dar un pequeño paseo por Chinatown y me senté en una terraza a cenar unas ancas de rana con salsa de ostras mientras veía desfilar el bullicio delante de mis narices. Tras dormir doce horas del tirón mi cuerpo se va asentando al cambio.

Estoy alojado en el barrio viejo, Chinatown, concretamente en Petaling Street, donde existe una de las mayores aglomeraciones humanas del sudeste asiático. Esta mañana me he acercado a Jalan Ampang, a la embajada de Tailandia para solicitar un visado de turista de dos meses y mañana por la tarde me lo dan, así que no me queda mucho que hacer por aquí. Ya conocía Kuala Lumpur de antes y no es que me entusiasme demasiado, para mi gusto nada que ver con mi amada Bangkok así que dentro de un par de días tiro para Tailandia.