Llega el verano a las islas, nordeste fuerte, puro alisio atravesando Lanzarote, día tras día, soplando a veinte nudos, y así hasta Septiembre. Océano, lava, una ola, viento, una vela, pura energía.
Y mientras los turistas recorren las entrañas de los jameos, a través de cuevas y lagos, jugando a ver quién descubre antes esos cangrejos albinos y ciegos...
... la cancha de juego está justo en la superficie, al borde del mar, ¡a navegar!
...y ese viento que se cuela hasta la entrañas de la isla, nos despeina el alma y va puliendo el caracter de quienes llevamos décadas aquí...
ResponderEliminarUn abrazo y bienvenido.
Dientes largos, baba y morriña es lo que tengo ahora... Snif, un beso desde Gijón Óscar ;)
ResponderEliminarUff que olas! el agua supongo que sigue siempre fresquita! que recuerdos del 2008!
ResponderEliminarsaludos